martes, 26 de abril de 2011

Cándido o el optimismo de Volter


Hoy os voy a sorprender… con lo último que he leído, y que no tiene nada que ver, con lo que estáis acostumbrados en mí. Esta vez le ha tocado el turno a Cándido de Volter.
Os lo dije, sorprendidos, eh? Esta vez la recomendación vino del encargado del bar donde vamos a desayunar por la mañana, que me dijo que era el mejor libro que había leído, así que como mínimo tenia que leerlo.
Y aquí va mi relación con Volter que ha sido de lo más complicada, primero el libro esta escrito en 1759 y ya os podéis imaginar el tipo de escritura que tiene. Además en él seguimos las peripecias del pobre Cándido, un ser de lo más ingenuo, que desde que empieza el libro hasta el final, le sucede de todo y mayoritariamente negativo. Desde palizas, guerras, terremotos, naufragios, canibalismo hasta encontrar el dorado, pero no siendo este el final del libro, sino uno más de sus capítulos. Y todo por amor a su querida Cunegunda.
En fin, acostumbrada a leer novelas actuales, esto es un total cambio, hacia tiempo que no le pegaba un repaso a los clásicos. El verano pasado me pase por la literatura del 1890 con Oscar Wilde y hace tiempo que no releo nada de Shakespeare o de Jane Austen. Así que imaginaros.
El libreto me ha parecido una sátira muy exagerada de las ideas de Volter sobre la sociedad y la filosofía del momento, donde nadie se salva del humor inteligente e inigualable. Hay que mencionar sobre la crítica social hacia la patética de la situación de su época.
Sin duda alguna una de las obras máximas de autor. Representadas en personajes que habitan las instituciones, principalmente la iglesia y el ejército. Estos personajes irán cruzándose con Cándido y lo nutrirán de sabiduría donde incluso los eventos más sádicos y desastrosos serán interpretados con un humor tan pintoresco que nos representarán una colorida escena de la situación.
Para terminar, es un libro corto, de rápida lectura y que vale la pena leer en su idioma original. Pero igualmente hay muy buenas traducciones rondando, de hecho la mía a sido en Catalan.

Al igual que el libro mi ida de él ha sido corta y espero que con esto os animéis a leer sobre Volter y su optimismo.

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